La ironía se divide en varias clases clases:
a) Antífrasis: Dar a algo un
nombre que indique cualidades contrarias (“Peludo”, a un calvo)
b) Asteísmo: Consistente en aparentar una
humillación cuando lo que se pretende y consigue finalmente es
una alabanza honesta. Consiste en una Ironía inversa.
(“Te falta mundo”, a un viajero)
c) Carientismo: Usar expresiones que suenan verdaderas o serias para burlarse (“Nunca oí algo tan certero”, ante una frase desafortunada);
d) Clenasmo: Atribuir a alguien las buenas cualidades que nos convienen y a nosotros, sus malas
cualidades (“Tu vigoroso estado atlético contrasta con mi débil figura”, cuando en realidad es al revés)
e) Diasirmo: Humillar la vanidad del otro, recordándole cosas de las que debe avergonzarse (“¿Qué otra cosa puede esperarse de un hombre que una vez se vistió de mujer…?”)
f) Mímesis: Consiste en la imitación que se hace de una persona, repitiendo lo que ha dicho, imitando el modo de hablar, sus gestos y exagerando los ademanes, frecuentemente con el fin de burlarse de ella.